El Senado se niega a aprobar la ley anticorrupción que les limita sus beneficios en caso de resultar inmersos en acciones de corrupción,
El gobierno sigue alargando el proceso con los representantes de las marchas, no logran siquiera ponerse de acuerdo en el nombre del comité, mientras se sigue legislando a instancias de algunos asuntos por discutir.
Sin acuerdo gobierno, empresarios y centrales obreras. La disputa por escasos 30 mil pesos se convierten en un desgaste, un circo y un tiempo y dinero perdido que el país paga.
Sin acuerdo la Corte Suprema o lo que queda de ella porque no ha sido capaz de nombrar al menos su quorum, y ello limita, imposibilita y pudiera viciar la elección del fiscal general de la nación. Colombia sin fiscal.
Sin acuerdos es imposible seguir una trasformación que exigen las voluntades populares y que el ejecutivo evita. El periodo vacacional sirve para enfriar los ánimos, pero vendrá enero y sin resultados es probable volver por las revueltas y manifestaciones
Estado y sociedad enfrentados por estilos y modelos dentro de un Sistema que se flexa con mayor inclinación al favorecimiento de los menos sufridos. Vivir en Colombia es una dicha que sólo la entendemos quienes aquí nacimos, sufrimos y peleamos, acusamos e endilgamos mientras no hacemos parte. Pero siempre gozamos y olvidamos.
