Salman Rushdie escribió el libro en el que se adentra en el corazón de las creencias musulmanas y se burla de sus sensibles principios, ello produjo la fatua en su contra que sólo desaparece por determinación de quien la impuso (El líder político y espiritual revolucionario, Ruhollah Musavi Jomeiní) pero este ya falleció, sólo queda otra opción; la muerte del imputado.
Los musulmanes creen que el profeta Mahoma en el siglo VII de la era cristina fue visitado por el ángel Gabriel quien, durante 22 años, le recitó las palabras de Dios. A su vez, Mahoma repitió las palabras a sus seguidores. Estas palabras acabaron escribiéndose y se convirtieron en los versos del Corán /LP7D/
La novela de Rushdie recoge estas creencias fundamentales. Uno de los personajes principales, Gibreel Farishta, tiene una serie de sueños en los que se convierte en su homónimo, Gabriel. En estos sueños, Gibreel se encuentra con otro personaje central haciéndose eco del relato tradicional del islam sobre los encuentros del ángel con Mahoma.
Rushdie elige un nombre provocativo para Mahoma. La versión del profeta que aparece en la novela se llama Mahound, un nombre alternativo para Mahoma utilizado durante la Edad Media por cristianos que le consideraban un demonio.
Además, el Mahound de Rushdie pone sus propias palabras en boca del ángel Gabriel y dicta edictos a sus seguidores que refuerzan convenientemente sus egoístas propósitos. Aunque en el libro el escriba ficticio de Mahound, Salman el Persa, rechaza la autenticidad de los recitados por su maestro, los registra como si fueran de Dios.
En el libro de Rushdie, atribuye a las opiniones sexistas de Mahound ciertos pasajes reales del Corán que colocan a los hombres “a cargo de las mujeres” y dan a los hombres el derecho de golpear a las esposas de las que “temen la arrogancia”.
A través de Mahound, Rushdie parece poner en duda la naturaleza divina del Corán.
Sobre los versos satánicos, Rushdie ha sostenido “Es posible respetar a los individuos, protegerlos de la intolerancia, y al mismo tiempo ser escéptico sobre sus ideas, incluso criticarlas ferozmente”.
Tras la muerte de Jomeini, el Gobierno de Irán anunció en 1998 que no aplicaría su fatua ni animaría a otros a hacerlo. Rushdie de origen libanés nacido en Londres vive en Estados Unidos con mínimas apariciones públicas, en una de ellas el pasado viernes fue atentado contra su vida por un fanático religioso.