El dictador Bashar al Assad fue reelegido con el 95.1% presentándose como el hombre de la reconstrucción del país devastado por la guerra
El dictador se instala para un cuarto mandato, en unas elecciones celebradas en un país destrozado por la sangrienta guerra, a pesar de las acusaciones de Occidente de que los comicios no eran “ni libres ni justas”./tribuna.com
14,2 millones de personas acudieron a las urnas, Assad reemplazó a su padre Hafez, fallecido tras 30 años en el pode.
En 2011 comenzó una guerra en la que participan numerosos beligerantes y potencias extranjeras. Iniciado con la represión de las protestas prodemocráticas en el marco de la Primavera Árabe, el conflicto ha dejado más de 388.000 muertos y ha llevado al exilio a millones de sirios.
En 2014, obtuvo más del 88% de los votos con más del 80% de la población viviendo en la pobreza, según Naciones Unidas.