En los últimos días de verano la migración de personas de medio oriente, Asia y África en la ruta de los Balcanes vuelve a aumentar, ahora al menos son 10 mil y con ellos la miseria, la violencia y las devoluciones ilegales en la frontera exterior de la UE en Croacia.
Ahora empieza a hacer frio, Europa se congela y así la ilusión de miles de refugiados esperan en ruinas y tiendas de campaña en asentamientos humanitarios, pero también los hay independientes en los alrededores en el oeste de Bosnia./LP7D/Amnistía Internacional España
En la estación principal de trenes de Praga, multitud de morrales y mochilas improvisadas de todos los colores y olores proviene del mismo sitio, son sirios, iraquíes, afganos, pakistaníes, africanos y asiáticos, todos en busca de su oportunidad de cruzar la frontera hacia la UE.
Todas las historias, todos los dramas, reiteradas devoluciones, cambios de nombre, documentación falsa, lágrimas y llanto desespero y terror que infunden miedo y violencia.
Los de Praga ahora son la avanzada de una nueva ola de refugiados dicen, viene por miles y la pretensión es alcanzar Europa antes del invierno. están aburridos de los campamentos sin solución diferente al retorno, incluso mejor quedarse entonces en el campo de refugiados de Lipa.
La crisis humanitaria en el oeste de Bosnia no ha terminado, pero se ha vuelto más manejable. Muchos migrantes han llegado ya a su destino: Alemania, Francia o Italia, otros esperan en Sarajevo o Serbia.
por años organizaciones de ayuda locales y voluntarios de Alemania, Austria, Suiza e Italia se ocupan de las personas que huyen. La iniciativa SOS-Bihac se fundó en medio de la gran crisis de refugiados de 2015.
Ahora periodistas y paramédicos de organizaciones de ayuda, conocen bien los lugares de paso y campos de refugio, ruinas y escondites del frio bosque, pasar a Europa no será fácil, pese a tener alimentos y medicamentos y otras ayudas.
Luego viene las disputas entre ellos por situaciones de precariedad, su violencia les agrava las heridas, existe alcohol de contrabando, extorsiones y robos, caso de abuso sexual. El desespero angustia y hace que se tomen determinaciones de fin, no importa cómo, el intento es la lotería.
En toda frontera exterior de la UE hay rastros claros de migrantes, pero más de los que se mueven en los Balcanes camino hacia Europa. También hay guardias fronterizos patrullando de lado y lado.
Que buscan de nosotros se preguntan en Europa que, pese a los difíciles momentos pre invernal, en qué lugar los vamos a tener si ahora todas las posibilidades de ayuda están dadas para los de aquí, no hay nada que dar, regresar será una salida, pasar podría significar morir de frio y hambre. Muchos no saben que su travesía puede convertirse en un juego de vida o muerte»