El mundo presiona una pausa o un alto al fuego en la guerra Israel – Hamas, en la Franja de Gaza para que se pueda entregar ayuda humanitaria a los civiles palestinos asediados de los cuales, según el ministerio de salud desde el 7 de octubre, 5.791 han muerto, de ellos 2.360 niños.
«Esto es la guerra. Es el combate. Es sangriento. Es feo y va a ser complicado», afirmó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca /LP7D/es.ara.cat/
Ahora no es sólo en Gaza, Reuters informa que se intensifican los enfrentamientos mortales entre el ejército israelí y los palestinos en la ocupada Cisjordania, y han resurgido entre Israel y el grupo libanés Hezbollah, fuertemente armado y respaldado por Irán, a lo largo de la frontera entre Israel y el Líbano.
El gobierno de Benjamín Netanyahu frena la invasión a Gaza por petición de presidentes del mundo, pero los militares muestran su furia para que sea haga rápido, no tiene importancia si son o no de Hamas, está de por medio la venganza por los caídos el 7 de octubre, la seguridad del país y la deshonra sufrida cuando supuestamente son el ejercito mejor dotado del mundo.
Entre tanto la diplomacia de Joe Biden presidente estadounidense y Mohammed bin Salman, príncipe heredero de Arabia Saudita, trabajan «para mantener la estabilidad en toda la región y evitar que el conflicto se expanda», lo que pondría en peligro la seguridad en una región clave para el suministro mundial de energía. Sunak, Scholz y Macron hacen visitas de solidaridad a Israel, pero tienen muy poca credibilidad