En la Asamblea Nacional y luego de pasar por alto la cámara baja para impulsar un cambio profundamente impopular en el sistema de pensiones /Un alivio de corta duración para el presidente Enmanuel Macrom y su gobierno / Disturbios violentos han estallado en todo el país / El jueves próximo se convoca la novena jornada nacional de huelgas y protestas.
El resultado será un alivio para Macron: una moción de censura exitosa habría hundido a su gobierno y anulado la legislación, que tiene como objetivo aumentar la edad de jubilación en dos años a 64. Pero el alivio podría ser de corta duración /LP7D/
Por un lado, la votación estuvo más reñida de lo esperado. Unos 278 diputados votaron a favor de la moción de censura tripartita, solo nueve menos que los 287 necesarios para que tuviera éxito.
Además, los sindicatos y los manifestantes se han comprometido a continuar con las huelgas y protestas contra la reforma de las pensiones. Los observadores dicen que el hecho de que Macron no haya encontrado suficiente apoyo en el parlamento para someter a votación sus propuestas de pensiones ya ha socavado su agenda reformista y debilitado su liderazgo.
Tan pronto como se anunció el estrecho fracaso de la votación, los legisladores de la extrema izquierda La France Insoumise (LFI, France Unbowed) gritaron «¡Renunciar!» a la primera ministra Elisabeth Borne y blandió pancartas que decían: “Nos encontraremos en las calles”. “Nada está resuelto, continuaremos haciendo todo lo que podamos para que esta reforma se retire”, dijo a los periodistas la jefa del grupo parlamentario LFI, Mathilde Panot.
Los en los últimos días y los sindicatos han prometido intensificar su huelga, dejando a Macron enfrentando el desafío más peligroso a su autoridad desde el levantamiento de los “chalecos amarillos” hace más de cuatro años.