Volodímyr Zelensky ha sido puesto a raya en Latinoamérica, su nefasta inacción por el desangre de su país no interesa en este lado del mundo.
A Mercosur no le interesó escuchar las quejas y el maniqueo de Zelenski. /LP7D/epe.es
Latinoamérica ha frenado a Volodímir Zelenski, hasta ahora, cuando solicitaba hablar nadie se lo negaba, pero el mundo empieza a entender la guerra, y la indolente posición para evitarla e intentar incluir al mundo en un conflicto mayor por un país que siempre ha sido considerado un “paria” en Europa.
Las miradas apuntan al presidente de Brasil Jair Bolsonaro y al presidente de Argentina, Alberto Fernández por sus relaciones con el presidente ruso Vladimir Putin. Además, nada liga a Latinoamérica a un país prácticamente desconocido, sin relaciones por estos lados y cargado de una reputación de corrupción y terror.
El Mercado Común Suramericano, que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, no logró el «consenso» obligatorio para dar voz al presidente de Ucrania, en la cumbre de Asunción que se inauguró ayer con la reunión de Cancilleres y se cerrará hoy con los jefes de Estado.
La discreción se impuso en vísperas de que Uruguay tome el testigo de la Presidencia Pro Tempore del grupo. Hasta ahora nadie confirma quién o quiénes fueron los que pusieron el veto al hombre que llevó a su país a una guerra que pudo evitarse siempre, pero prefirió quedarse al sometimiento de los Estados Unidos e involucrar a Europa en un conflicto que sólo les concierne a ellos, a su propia falta de cohesión y capacidad de gobierno.