El ejército israelí dijo el martes que había alcanzado 130 «objetivos militares» en Gaza, matando a 15 «operativos de Hamas y la Jihad Islámica»
Una calle de Gaza tras el masivo ataque israelí/palestinalibre.org
Es la respuesta a una andanada de cohetes disparados por Hamas y otros militantes palestinos, en medio de una espiral de violencia provocada por nuevos disturbios en Jerusalén Este que se saldaron con 500 heridos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió que Hamas había cruzado una «línea roja» al dirigir misiles hacia Jerusalén y que el estado judío «respondería con la fuerza».
«No toleraremos ataques a nuestro territorio, nuestra capital, nuestros ciudadanos y nuestros soldados. Quienes nos ataquen pagarán un precio muy alto», dijo Netanyahu
En Jerusalén la tensión es alta debido a la intervención de la policía antidisturbios que enfrentó a los fieles palestinos el último viernes del mes sagrado de ayuno musulmán del Ramadán.
«Hemos empezado a atacar posiciones de Hamas (…) y digo ‘empezado’», dijo Jonathan Conricus del ejército israelí que ha tomado como blanco un comandante de Hamas en el norte de la Franja de Gaza. Más tarde, las fuerzas armadas dijeron que han atacado a otros miembros del movimiento islamista y que han multiplicado los bombardeos sobre el enclave.
Las autoridades locales de Gaza dieron cuenta de 20 muertos, incluidos nueve niños, y muchos heridos en estos bombardeos