Dirigencia se mantienen atemorizada frente a la posibilidad de que las vacaciones de Semana Santa desaten nuevos contagios y colapsen las unidades de cuidados intensivos
El sector turístico sigue siendo uno de los más afectados en Europa/levanteEMV.com
Diez regiones de Italia están en “zona roja”, la de mayores restricciones. El país se encamina hacia los tres festivos de Semana Santa, 3, 4 y 5 de abril, a un confinamiento total.
Los hoteleros italianos están indignados al comprobar que se permite viajar al extranjero durante las vacaciones de Semana Santa, mientras el país está prácticamente confinado con las actividades cerradas y la prohibición de trasladarse de una región a otra.
En Francia la saturación de las unidades de cuidados intensivos provocó reclamación al presidente Emmanuel Macron, solicitan un “verdadero confinamiento”, que permita rebajar la presión a la que se ven sometidos. Sin medidas más restrictivas, solo les queda como opción transferir pacientes a regiones menos afectadas, abrir nuevas camas de reanimación o seleccionar a los enfermos que pueden atender. Espera el que la estrategia de vacunación pueda traducirse en una ralentización de la epidemia,
Alemania exige a partir de la medianoche un test negativo de coronavirus a quien llegue por vía aérea al país. Mientras, la canciller, Angela Merkel, aboga por restringir los movimientos internos y la implementación de manera consecuente las medidas acordadas.
España prorrogó hasta el próximo 30 de abril la restricción temporal de viajes no imprescindibles desde terceros países a la Unión Europea y países asociados al espacio europeo Schengen.
Reino Unido está aflojando medidas para permitir integración de familias pero mantiene restricciones de viajes al exterior y las vacaciones prácticamente se han cancelado.