Este 9 de junio de 2024 las elecciones en la unión europea. Casi 500 millones de personas podrán votar sus candidatos, podrán hacerlo en democracia. Pero que tan democrático resulta la elección de sus lideres y que afectación tiene las presiones políticas de EE. UU. y la extrema tensión de la guerra en Ucrania que OTAN produce cada día y desconectan las preferencias partidistas / EE. UU. sabe que sin Europa la influencia geopolítica de China y Rusia serían mucho mayores; intervino y se quedó con Europa. ¿Europa reaccionará y será capaz de sobrevivir si ellos?
La UE es una democracia sin democracia, es apenas un modelo de democracia en la que las mayorías se someten a las voluntades de las elites influenciadas. Europa desaparece, la vida es menos libre y la desinformación provocada y obligada en burocráticos ambientes
El brutal sometimiento y perdidas de libertades está claro, las confesiones y encantamientos ya no son suficientes. Europa y su democracia viven de la promesa y la ilusión de crear mejores perspectivas para las personas. Una creciente burocracia en la UE carcome la identidad europea, su democracia sin libertades son un mazazo a quienes quisieran volver a la vieja Europa. La muerte de Europa está sucediendo desde que sus libertades se perdieron.
Europa y su Unión Europea se gestaron bajo principios de “Europa como proyecto de paz”, “Europa como área económica” y “Europa como modelo de libertad” ¿Que queda de ese patrimonio? Europa se adormeció en el proteccionismo, el populismo y la división en un momento de mundial que la ira y el odio proliferan en redes sociales y llenan de susceptibilidad a las personas. ¿Aún se puede hacer la tarea?
La Europa marginal amparada por China y Rusia, está ganando popularidad en los parlamentos, la inclinación de la guerra a favor de Rusia y la democracia más grande del mundo en EE. UU. en un entorno de guerra civil son el escenario sobre el que Europa debe dinamizar su autonomía. ¿lo harán los próximos líderes?
La UE elige más de 750 parlamentarios representantes de sus naciones socias en un claro ejercicio de democracia, pero quienes aspiran a liderar no se someten al escrutinio, son puestos allí por las élites y la burocracia.
Ahora que Europa quiere olvidar a Charles Michell, Joseph Borrell o Ürsula von der Leyen, es justamente está última la predilecta de las élites con según ellos una amplia coalición de demócrata cristianos, socialdemócratas, liberales y fuerzas verdes ¿? Otros con ambiciones son el ex presidente del BCE y ex primer ministro italiano, Mario Draghi, y Mark Rutte ex premier de países bajos y hasta Pedro Sánchez de España cree poder aspirar pese a su complejidad ética.
Recuperar la competitividad de Europa tras su rezago de años debe obedecer a un cambio de tendencia. Una Europa diferente con su riqueza histórica, el poder de un solo Estado nación y la naturaleza de los desafíos requiere prioridades diferentes. Juntos, los 27 estados miembros forman un mercado de tamaño relevante, juntos son capaces de crear capacidades de defensa, juntos pueden desarrollar innovaciones revolucionarias.
Las grietas de Polonia, Hungría, Eslovaquia, los miedos a Rusia de llegar el próximo año hasta Portugal son un “chiste” bobo, una tontería o una estupidez que se inventó la UE y la OTAN y que los partidos populistas aprovechan demostrando su poco querer por Europa. Ucrania es un argumento ajeno al que se abrió la puerta y se tomó la casa y al que ahora es un gran problema sacar porque no tiene ni la condición ni la naturaleza.
Con estas consideraciones generales, menos Europa conducirá en última instancia a la muerte de Europa. No hay vuelta atrás, pero sí un mejor camino hacia adelante. De eso se trata esta elección europea. ¿Podrán?