Fin a la enemistad mortal entre las dos naciones bajo la lupa del poder que ejerce China y que occidente. China se está convirtiendo silenciosamente en la primer potencia mundial.
China ha hecho posible el histórico acuerdo, con discreción y sin alboroto publico ni mediático en Beijing se adelantaron los encuentros por varios días/LP7D/
La fuerza del gigante asiático tiene un trascendental momento para el orden mundial. En Europa la noticia debe producir un reordenamiento que está poniendo en serias condiciones a su ciudadanos y que en gran medida se debe a la obstinación de entrar en una guerra que las mayorías ven ajena.
Un mundo tan cambiante implica olvidarse de exclusivas y no alternativas provocadas por un poder desgatado de Estados Unidos y Rusia. Ahora es otra la situación, las opciones son múltiples, las alianzas más exitosas son aquellas que promueven los intereses nacionales con la combinación adecuada de flexibilidad y principios.
Irán y Arabia Saudita dan una gran lección al mundo, desde sus decisivas ideologías crecerán voluntades unidas y a conveniencia, así enterraran su enemistad mortal.
Irán ha sido el representante de China en el Medio Oriente durante muchos años. El recién elegido presidente chino, Xi Jinping, hizo a los saudíes una oferta de cooperación hace solo unos meses y venció pese a la intervención de Estados Unidos y el propio presidente Joe Biden
Para occidente es lamentable haber perdido tanto crédito en Asia como en Oriente Medio: la condescendencia con la que los políticos occidentales han tratado a los países árabes ha erosionado la confianza.
Cuando el nuevo heredero al trono saudí fue finalmente declarado paria por Occidente por el presunto asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi, el reino le dio la espalda y buscó nuevos aliados en Oriente. China llegó en el momento justo, aprovechó el momento y se ganó a los saudíes para su lado. Además de Beijing, Riyadh también coopera con Moscú. Turquía también se ha convertido en un socio para muchos e incluso serpentea entre los mundos.
El gobierno estadounidense ha reconocido el ascenso de China, lo ha puesto como peligroso y no como ventajoso y el inició de una política dura contra China, primero se estancó al no ceder en su primacía de la política militar y de sanciones, segundo la intervención y empuje a Europa a ingresar en la guerra entre Ucrania y Rusia le ha debilitado en enormidad incluso en caso de una eventual derrota rusa, se ha perdido credibilidad y confianza.
La guerra ha debilitado a Occidente y a Rusia en comparación con China. Otro conflicto que esta por ser intervenido con éxito chino es el de Yemen en donde Estados Unidos tiene serios problemas por denuncias contra algunos contratistas de Haber «apoyado e instigado crímenes de guerra y ejecuciones extrajudiciales»