Los niveles de calidad del aire han recibido mucha atención en los últimos meses.
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A raíz de los cierres de COVID-19, muchos lugares informaron un marcado aumento en la calidad del aire. El norte de la India captó la atención del mundo cuando se informó que la cordillera del Himalaya era visible por primera vez en décadas.
Por otro lado, a finales del verano, los incendios forestales arrasaron el noroeste del Pacífico y California, cubriendo regiones enteras con una espesa capa de humo que se extendió por cientos de millas.
¿Cómo se mide la calidad del aire y qué se incluye en los puntajes de salud que vemos?
Medición del índice de calidad del aire
Cuando vemos que la calidad del aire es «buena» o «insalubre», esas categorías de salud pública se derivan del Índice de Calidad del Aire (AQI).
En los EE. UU., El AQI se calcula utilizando cuatro contaminantes del aire principales regulados por la Ley de Aire Limpio:
- Ozono a nivel del suelo
- Monóxido de carbono
- Dióxido de azufre
- Contaminación por partículas, también conocida como materia particulada
Algunos países tienen una forma ligeramente diferente de calcular sus puntuaciones. Por ejemplo, India también mide los niveles de amoníaco y plomo en el aire.
Para hacer estas lecturas más accesibles, el AQI tiene un sistema de puntuación que va de 0 a 500, utilizando datos recopilados de estaciones de monitoreo del aire en ciudades de todo el mundo. Las puntuaciones por debajo de 50 se consideran buenas y tienen muy poco impacto en la salud humana. Cuanto más alta sea la puntuación, peor será la calidad del aire.
Para facilitar aún más la comunicación de los posibles riesgos para la salud al público, los rangos de puntuaciones se han organizado en categorías descriptivas.
Rango de puntuación del AQI | Categoría AQI | PM2.5 (μg / m³) | Riesgos de salud |
---|---|---|---|
0-50 | Bueno | 0-12,0 | La calidad del aire es satisfactoria y presenta poco o ningún riesgo. |
51-100 | Moderar | 12,1-35,4 | Las personas sensibles deben evitar la actividad al aire libre. |
101-150 | Insalubre | 35,5-55,4 | El público en general y las personas sensibles en particular corren el riesgo de sufrir irritación y problemas respiratorios. |
151-200 | Insalubre | 55,5-150,4 | Mayor probabilidad de efectos adversos y agravamiento del corazón y los pulmones entre el público en general. |
201-300 | Muy insalubre | 150,5-250,4 | El público en general se verá notablemente afectado. Los grupos sensibles deben restringir las actividades al aire libre. |
301+ | Peligroso | 250,5+ | El público en general tiene un alto riesgo de experimentar fuertes irritaciones y efectos adversos para la salud. Todos deben evitar las actividades al aire libre. |
Materia particular
Si bien todas las formas de contaminación atmosférica son motivo de preocupación, son las partículas más pequeñas de 2,5 μm las que reciben la mayor atención. Por un lado, podemos ver evidencia visible en forma de neblina y humo cuando aumentan los niveles de PM2.5. Además, a estas partículas finas les resulta mucho más fácil entrar en nuestro cuerpo a través de la respiración.
Hay una serie de factores que pueden aumentar la concentración de material particulado de una región. Algunos ejemplos comunes incluyen:
- Centrales eléctricas de carbón
- Estufas para cocinar (muchas personas en todo el mundo queman material orgánico para cocinar y calentar)
- El humo de los incendios forestales y la tala y quema de tierras
Incendios forestales y calidad del aire
Los puntajes de la calidad del aire pueden variar mucho de una temporada a otra. Por ejemplo, las regiones que dependen del carbón para la generación de energía tienden a ver picos de puntuación de AQI durante los períodos pico.
Una de las mayores fluctuaciones se produce durante la temporada de incendios forestales, cuando los lugares que normalmente tienen puntuaciones en la categoría «buena» pueden ver que las puntuaciones alcanzan niveles peligrosos. En 2020, el este de Australia y la costa oeste de los EE. UU. Experimentaron caídas masivas en la calidad del aire durante sus respectivas temporadas de incendios forestales.