Inesperadamente comenzó a hacer erupción en la noche del 18 al 19 de enero. Así lo informa el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, ubicado en la capital de Sicilia, Catania
Aproximadamente a las 7:15 pm del lunes, uno de los muchos cráteres ubicados en la ladera sureste del Etna comenzó a hacer erupción dos flujos de lava, uno fluyendo hacia el Valle del Bove en el este, el otro hacia el norte. Esto fue acompañado por la liberación de una columna de ceniza y humo, temblores de tierra y temblores infrasónicos.
En la mañana del 19 de enero, la actividad del volcán comenzó a declinar. Actualmente, los flujos de lava se están enfriando, los temblores y los temblores se han debilitado significativamente. Los observadores no notan ningún cambio significativo en el contorno del volcán.
Al mismo tiempo, los laboratorios europeos, en particular el Centro de Observación de Cenizas Volcánicas en la Atmósfera (VAAC) en Toulouse, Francia, notan una nube de cenizas que se mueve a una altitud de unos 4 kilómetros hacia el sur.