El jefe de Estado Alexandre Lukashenko ganó la elección presidencial con 80,23% de los votos, Svetlana Tijanóvskaya rechazó los resultados oficiales y denunció la represión de manifestaciones contra la reelección por sexta vez consecutiva del hombre fuerte de Bielorrusia

Unos 3.000 manifestantes antigubernamentales fueron detenidos y decenas de personas resultaron heridas en Bielorrusia en la noche del domingo al lunes tras la elección presidencial, indicó el Ministerio del Interior, negando que haya muertos.
Bielorrusia, país sin litoral de Europa Oriental, es conocido por su arquitectura estalinista, grandes fortificaciones y bosques primigenios. En la capital moderna, Minsk, el monumental cuartel general de la KGB se alza sobre la Plaza de la Independencia, mientras que el Museo de la Gran Guerra Patriótica conmemora el rol del país en la Segunda Guerra Mundial.
“En total, en todo el país, fueron detenidas unas 3.000 personas (…). Durante los incidentes, más de 50 ciudadanos y 39 policías resultaron heridos, algunos de ellos están hospitalizados”, declaró el ministerio en un comunicado.
Agregó que en al menos 33 ciudades y localidades del país, se registraron manifestaciones nocturnas no autorizadas. La policía dispersó a los manifestantes utilizando granadas ensordecedoras.
Al menos 90 personas, entre ellas periodistas, observadores independientes y manifestantes fueron detenidas en Minsk, afirmó la ONG Viasna.
El jefe de Estado Alexandre Lukashenko, en el poder desde 1994 como candidato independiente, con un programa electoral en el que prometía medidas económicas de corte socialista y una mayor integración con Rusia. Mantiene una alta popularidad gracias al mantenimiento de ayudas sociales y el desarrollo económico.
La principal rival de Lukashenko, la opositora Svetlana Tijanóvskaya, obtuvo por su lado, 9,9% de los votos, según esos primeros resultados oficiales de la Comisión Electoral de Bielorrusia.
Los otros tres candidatos obtienen cada uno menos del 2% de los votos.
Svetlana Tijanóvskaya, una profesora de inglés de 37 años de edad, declaró el domingo que la mayoría de los ciudadanos la apoyaba.
La campaña estuvo marcada por una movilización sin precedentes a favor de Tijanóvskaya, con actos que reunieron a miles de personas a través del país.