Habitantes del municipio de Timba en el departamento del Cauca al sur de Colombia, corrieron a la Policía y al Ejército. Días antes, campesinos supuestamente coaccionados secuestraron a 200 militares. La zona es estratégica para las rutas de los carteles de narcotráfico y el gobierno ha ordenado su bloqueo para evitar las economías ilícitas.
Las disidencias de las Farc que dirge «Ivan Mordisco» estarían tras las alteraciones del orden publico en el municipio de Timba / «¡Váyanse, hijueputas!», «¡Pa fuera!», «¡Se van todos, hijueputas!», se escuchaba gritar frenéticamente a un grupo de personas que llevaban banderas blancas, en señal de que eran civiles que no estaban armados /LP7D/
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha tenido como política el diálogo con los grupos armados y siempre ha mantenido la determinación de militarizar el cañón del Micay, que es una región del departamento del Cauca al sur del país y que produce más del 70 % de la hoja de coca con salida al Pacífico.
Petro ha hablado de las supuestas alianzas, basadas en pagos, que tendrían miembros de las FF.MM. con las organizaciones armadas irregulares, para permitirles la ocupación y paso de la zona, sometiendo a la población.
Fuentes militares y el medio El País, indican que los grupos disidentes Farc ordenaron a la comunidad salir con banderas para expulsar a los militares. Los habitantes de esa localidad son instrumentalizados «de manera periódica y permanente» dijo otra fuente al medio de Radio BLU.
El director de la Policía, William Salamanca, pidió a la comunidad que rodee a la autoridad. «Yo entiendo que están bajo la presión de estos grupos criminales, pero aquí seguiremos haciendo presencia porque estamos cumpliendo con la constitución» dijo.