ChatGPT tiene muchos admiradores actualmente, pero no es una inteligencia y no comprende nada de lo que dice. ChatGPT es sólo un robot conversacional que se basa en contenidos de enciclopedias de textos, sonidos, imágenes o vídeos / Sus creadores no controlan su potencial.
La perspectiva de que la IA trate las enfermedades mentales plantea una gran cantidad de preocupaciones éticas y prácticas /LP7D/Spring languages/
A pesar de todo, muchas compañías anuncian frecuentemente “nuevas inteligencias artificiales generativas”, capaces de “crear” contenidos nuevos y originales, sin intervención humana.
El mundo entabló una relación con las trasformaciones y posibilidades artificiales hace varias décadas, pero aún así no existe un sistema o método que pueda facilitar el aprendizaje y la trasformación como entusiastas marketineros proponen hoy y que lo ofrecen como una gran herramienta. Todo aún es incierto y lo de ellos probablemente falso.
Realmente ninguna de estas herramientas son inteligencias y ninguna de ellas crean algo sin intervención humana. Y, sobre todo, ninguna de ellas comprende la realidad ni lo que genera.
Su única característica importante es que estos programas pueden ayudarnos a mejorar la producción humana, el arte de crear y componer.
Las respuestas de ChatGPT para comprobar su capacidad de entendimiento y han demostrado que cualquier pregunta que requiere comprensión para responder correctamente puede dar lugar a respuestas falsas, incorrectas o directamente inventadas.
Si queremos hacer uso en un buen trabajo, toda la información que ChatGPT nos ha suministrado la debemos comprobar, revisar, comprender, corregir y volver a redactar.