OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) creada en 1949 para la defensa militar de sus socios cumple 75 años sin pena ni gloria. La OTAN despertada por la guerra en Ucrania, apenas se reconoce con su ímpetu sin dinero y sin efectiva actividad apenas realiza hace un par de meses ejercicios sin mayor trascendencia / En realidad hay muy poco que celebrar.
La OTAN es más un ente burocrático que sirve de emisario de los EE.UU. a sus demás socios a quienes obliga y protege. Hasta ahora nadie se ha beneficiado. Pero la OTAN a punto de extinguirse por mandato del expresidente Donald Trump hace unos años, tomó aire con la guerra en Ucrania y promete defender a sus socios que paradójicamente han sido llenados de propaganda bélica y miedo, situación que ha llevado a su crecimiento en número nada más.
La expansión de la OTAN provocó situaciones de amenaza por parte de Rusia que consideró un peligro para su seguridad el que un país neutral como Ucrania fuera empujado a ingresar a la OTAN como una estrategia bélica de EE.UU. programada hace más de 20 años.
OTAN busca hoy afanosamente desde su predecible jefe conminar a sus socios a revisar de nuevo sus almacenes y entregar lo que tengan a Ucrania (Ninguno en estos dos años habrá variado su arsenal porque sus programas de defensa y producción de armas han estado restringidos y apenas existen algunas aprobaciones para enfrentar a futuro el rearme para su propia defensa) ¿por ahora sigue siendo una falacia y una imposición al viento la de OTAN?
Las economías de los aliados están en deuda con la OTAN, la exigencia de está del 2% del PIB no la cumplen y cada vez es más difícil pero la presión de EE.UU. hará crecer el sometimiento de los ciudadanos europeos con un tema publicitario que pocos consumen “Europa necesita a EE.UU. para su seguridad” pero la respuesta de analistas es rápida “EE.UU. necesita más de Europa que Europa de EE.UU.”
Para la OTAN, “EE.UU. tiene más amigos y más aliados que cualquier otra gran potencia. “No creo en EE.UU. solo, lo mismo que no creo en Europa sola creo en EE.UU. y Europa juntos, en la OTAN porque juntos son más fuertes” insiste el jefe Jeans Stoltenberg.
En los 75 años de la OTAN su jefe ahora con sus discursos inocuos y angustiosos sin otra solución memorable y en términos no bélicos pareciera ¿evadir o justificar su responsabilidad de la derrota en Ucrania?
OTAN tiene su más gran reto, revertir la infrafinanciación en defensa, en relación a sus socios les invita a una nueva revisión y con imposiciones que pudieran incluso llevar sanciones a quienes no lo hagan. Pero no presenta una estrategia afín al futuro de Europa.
OTAN enfrenta una severa crisis de credibilidad y su estrategia junto a la UE de meter miedo a la población europea empieza a caer. La justificación para seguir presionando los bolsillos de los europeos para financiar la guerra va llegando a extremos críticos en los que la población ya no soporta. La derrota que sufre Ucrania es una derrota para la OTAN que quiere evitar a toda costa, tampoco desea enfrentar a Rusia. OTAN no desconoce ni oculta el poder ruso.
No tenemos previsto enviar tropas de la OTAN a Ucrania, no ha habido ninguna petición en ese sentido, pero los ucranianos están pidiendo equipamiento, munición, armas y nosotros se los estamos proporcionando, asegura Stoltenberg