Ciudadanos de la CDMX salieron a las calles de las colonias La Condesa y La Roma que sobresalen por comercios suntuosos y restaurantes de moda / Los elevados precios de la vivienda en la ciudad y el alto costo de vida en general, el aumento de desempleo y expatriados estadounidenses provocó en pasados días un protesta que es apenas una muestra de las dificultades de los más de 25 millones de habitantes de la capital mexicana. Los carteles de presión decían, “¡ Aquí hablamos español!” “¡Gringos, regresen a su país!” “¡México para los mexicanos!”.
El mercado inmobiliario de CDMX y otras urbes importantes del país tiene gran afectación desde época de pandemia, la intrusión de estadounidenses desborda los costos de oferta en general en servicios de vivienda. El teletrabajo es una fuente de la consecuencias de encarecimiento, buena parte de los mexicanos tienen afectación por atracciones y comodidades que pagan en dólares los turistas y los no ahora tan eventuales trabajadores estadounidenses. Las consecuencia primaria es el aumento de los alquileres.
El caso de gentrificación que es el proceso de renovación urbana, residentes con mejores ingresos desplazan a residentes originales con graves positivos y negativos en áreas económicas, culturales y turísticas.
Grandes zonas urbanas de CDMX, clase media trabajadora han sido tomadas por inversionistas que elevan el nivel del costo de vida con negocios costosos para turistas, bares, restaurantes caros y, el de más apatía los Airbnbs.
Indicadores reflejan que entre 2020 y 2024, el número de Airbnbs en la CDMX pasó el 170 %, casas y departamentos comunes convertidos en alojamientos turísticos. La expansión de la vivienda en la ciudad no ha logrado mantener el ritmo, y como resultado, el alquiler promedio se ha disparado un 45.7 % desde 2020.
Los mexicanos residentes y comerciantes menores se desplazan a las afueras de la metrópoli buscando precios más asequible de vivienda. Pero esta situación ha crecido la animadversión a turistas y extranjeros particularmente estadounidenses.
Varios negocios han sido vandalizados hasta disturbios y destrozos además grafitis contra los «yanquis»
Claudia Sheinbaum, la presidenta de México ha expresado solidaridad pero igual condena los actos de xenofobia. «No puede haber un llamado, por legítima que sea su causa, un llamado a ‘¡Salir!’ para cualquier nacionalidad de nuestro país».
La Ciudad de México inició un plan de mejoramiento a la situación de la vivienda en la ciudad. El plan incluye restricciones y regulaciones sobre alojamientos temporales como Airbnb, y disposiciones de control de alquileres que ilegalizarían el aumento de las rentas.
«Paguen impuestos, aprendan español, respeten mi cultura», decía la pancarta de un manifestante; demandas que reflejan el sentimiento común de que los inmigrantes estadounidenses se niegan a integrarse a la cultura y la nacionalidad mexicanas.