Es un símbolo de París, los vendedores de libros cederán su espacio a los 600 mil visitantes que presenciaran de manera gratuita el desfile acuático e inaugural de delegaciones y atletas por el Sena.
Son más de 500 casetas ribereñas, muy antiguas sobre el margen del Sena, «La gente viene a vernos como viene a ver la Torre Eiffel y Notre Dame, (pero) quieren ocultarnos durante una ceremonia que se supone que representa a París», dijo Jerome Callais, presidente de la asociación de libreros de París/ Las autoridades dicen que es por «obvias razones de seguridad», /LP7D/
El gobierno francés está haciendo planes para garantizar la seguridad del evento, para lo que se desplegarán 35.000 agentes de seguridad y militares.
Pero Albert Abid siente que él y sus compañeros libreros están siendo excluidos de las celebraciones, y dice que le preocupa que su puesto de madera de 100 años se dañe en el proceso.
«Esta renovación es parte del patrimonio de los Juegos y ayudará a respaldar la solicitud para que los libreros del Sena sean reconocidos como patrimonio cultural inmaterial por la UNESCO», dijeron las autoridades.
La ciudad los ha invitado a mudarse a un «pueblo de libreros» especialmente creado en un «barrio literario cerca del Sena» durante la duración de los Juegos.