«Tenemos que gastar más. Tenemos que aumentar nuestra defensa colectiva» / “La disuasión y la defensa de la Alianza” / “Ucrania debe sobrevivir como una nación soberana, independiente y democrática» las prioridades del nuevo secretario general de la organización, el ex primer ministro holandés Mark Rutte.
La OTAN debe cambiar, el mundo es otro ahora, el modelo de un nuevo orden es evidente, Rutte no podrá insistir con mano de hierro y pensamiento bélico de su antecesor porque las amenazas del nuevo orden obedecen a la diplomacia y no a la guerra, obedecen a la inteligencia y no a la brutalidad / Rutte debe convencer antes de que contraponer armamentísticamente.
OTAN se siente amenazada y contamina con su miedo cargando con armas en post de la seguridad, pero la exigencia de mayores tributos a sus socios ahora mismo es una barrera, mayoría no podrán cumplir. Las alternativas de seguridad deben complementarse con estrategias de paz, algo que hasta ahora han demostrado no saber hacer y no interesarle pues su objetivo es contribuir con la industria armamentística a su favor.
Rutte como máximo jefe OTAN debe enfrentar una alternativa de poder cargándose la hegemonía de EE. UU. Los Brics son una realidad y el Sur global ahora es una opción diferente que incluye pronto a más de 150 países.
Rutte remplaza a Jens Stoltenberg que atizó los enfrentamientos OTAN – Rusia y provocó un sentimiento de guerra que acercó a Europa a una crisis escabrosa de la que no logra salir. Stoltenberg ha abogado persistentemente por el mayor apoyo posible a Kiev con sistemas de armas occidentales y ese es un “cáncer” que carcome las economías de sus socios cada vez más pobres, más sometidos y menos interesados en la guerra. Rutte va a continuar este camino.
Rutte, «Se considera a sí mismo como un solucionador de problemas, como un directivo» de cualquier manera el holandés enfrenta una nueva y dramática realidad de Europa y EE. UU. pero lo más importante será la respuesta a un nuevo orden mundial en donde ya no son los únicos.