Ambos conflictos fueron alimentados por EE. UU. y sus aliados actores OTAN y UE / La causa del “supuesto fracaso” según el medio estadounidense WSJ es que el orden ya no está en manos del presidente Joe Biden, en realidad va más allá / El ambiente preelectoral en EE. UU. tiene amplia influencia y casi mayor relevancia que las propias acciones del gobierno actual.
Funcionarios de la administración Biden admiten que “oriente medio está fuera de su dominio. “Todavía se impulsan conversaciones, pero el avance es poco probable”. Los lideres de Israel e Irán junto a sus aliados de la zona, desconocen la injerencia de Biden y su país. Una tercera guerra de aniquilación entre las partes está en marcha.
El escepticismo también crece entorno a Ucrania. Mientras los medios de occidente anuncian con “bombos y platillos” una fórmula secreta que el dictador ucraniano Volodomyr Zelensky ha desarrollado para llevar a la ONU y obligar a Rusia a salir de los territorios invadidos y terminar la guerra, la desconfianza y el hastío global en torno a Ucrania crece.
EE. UU. y Reino Unido se han silenciado después de promover un movimiento de permiso a Kiev para el uso de misiles, es decir, la OTAN atacaría a Rusia desde Ucrania. La respuesta del presidente Vladimir Putin frenó el ímpetu de escalada OTAN. Rusia es la nación con mayor poder nuclear que no dudará en usar en caso de ser atacada.
La semana finaliza con la visita a Kiev de la presidenta de la UE, Ürsula von Der Leyen, y un nuevo y millonario desembolso a Zelensky que los europeos nunca han decidido, un aberrante atropello y un impulso al plan Zelensky que irá a Washington a “enterar” a Biden, no solicitará su permiso, le exigirá y es probable que le intente chantajear ¿? El asunto energético de Europa está de por medio.
Joe Biden ha cumplido con el plan trazado, ha sido el gran causante de grandes conflictos armados y que complementaron el desastre de una pandemia. La muestra de la capacidad destructiva como la capacidad productiva de las industrias farmacéutica y militar armamentista son un gran resultado a los objetivos trazados.
Biden cumplió, los “supuestos fracasos” intentan justificar más que su olvido e incapacidad, el poder oculto de las élites del poder que lo alinean todo, el orden nunca estuvo en manos de Biden.
Ahora el panorama es más sombrío, en Europa el miedo sacude mientras sus lideres empujan la guerra, nadie protesta, están adormecidos, están fatigados o están hastiados, no se levanta una sola bandera de paz para oponerse a los desmanes de UE botando millones de euros a Ucrania y que nadie ha autorizado pero que al final todos van a pagar.
En Oriente medio el medio estadounidense WSJ, insiste en que frenar y advertir el dramatismo para el mundo de sus atroces combates poco les importa a los judíos y árabes. Occidente no lo acaba de entender.





