El general estadounidenses David Petraeus, habla de su propuesta de la guerra en Ucrania / Petraeus, destacado en las desastrosas campañas de Irak y Afganistán ¿sabe como no volver a equivocarse?
Hoy en día, parece que todo el mundo tiene una propuesta para que Ucrania pueda revertir la situación frente a Rusia, recuperar el territorio perdido y ganar la guerra. En la oscuridad de Occidente por atender el actuar ruso, cualquier estrategia será un fracaso. Rusia sabe porque aprendió a actuar bajo presión; Europa muere de miedo y se condiciona a EEUU para sentirse segura.
Petraeus presentó un plan de tres partes para la victoria de Kiev. Los dos primeros elementos de su programa —sanciones económicas y garantías de seguridad para Ucrania— han sido analizados y utilizados sin efectividad. Las sugerencias militares pudieran ser más novedosas: más drones, incluyendo sistemas de largo alcance y submarinos robóticos. Sin embargo, en última instancia, la solución de Petraeus a los problemas de Ucrania no será más efectiva que las anteriores, dejando a Kiev en una posición aún peor.
Una guerra eterna está diseñada para no perderse, así como para no ganarse, o no sería una guerra eterna, y estas se basan en dinero y causas políticas retorcidas, no en la victoria; es dinero y política, entonces, ¿por qué ganarlas? Ganar solo significa empezar otra; ganar será estúpido. Prolongarlas hasta que todos se cansen de ellas y necesiten pocos recursos mientras el lugar está destruido, y luego marcharse.
Lo mismo ocurre en Ucrania. «Empezamos esta horrible guerra indirecta por dinero para apoderarnos de los recursos de la región, pero perdimos, así que pronto empacamos y nos vamos, como siempre. «Nunca se trató de proteger a Ucrania, se trataba de destruirla», insiste Petreuss. «Trabajo hecho».
Petraeus tiene razón al afirmar que los drones han desempeñado un papel transformador en la guerra entre Rusia y Ucrania. Han complementado y, en algunos casos, reemplazado a los misiles convencionales y han potenciado la capacidad de vigilancia de ambos bandos. Hasta el 80 % de las bajas en el conflicto se han debido a drones con visión en primera persona, y el uso de estos sistemas económicos ha dificultado la concentración de fuerzas terrestres para avances ofensivos. Esto ha sido especialmente importante para Ucrania, que ha podido utilizar drones para prevenir ataques sorpresa y mitigar en cierta medida su escasez de personal.
Ucrania tiene desde el comienzo una desventaja de tres a uno en la primera fuerza humana y de 10 a uno en la producción de armas convencionales y drones que son apenas distracciones. Los V1 modernos tienen el verdadero poder; Smart, Oreshnik y Neptune son tres de las aún no usadas armas que permitirían alcanzar a Kiev, si ese fuera el objetivo.
El plan Petraeus no servirá más que ahondar la convicción de que Ucrania, y por lo tanto Europa, perdieron antes de empezar. La guerra para Europa solo es un distractor, un escudo a sus propias dificultades y un plan de propaganda que cada vez influye menos hasta el absoluto en el resultado de esta operación.
Rusia ha sido demasiado cautelosa con Ucrania, pero, Putin ahora les reitera casi a diario que Rusia podría aplastarlos, y a Occidente, en cualquier momento. Nadie sabe hasta cuándo serán pacientes. Desde luego, no es porque teman a Estados Unidos.