La BBC no se ha limitado a informar sobre las noticias, sino que ha opinado sobre ellas y ha actuado como si esa opinión fuera incuestionable. / BBC ha tomado partido en casi todo y ha denigrado e incluso se ha negado a publicar opiniones alternativas. / Manipuló y desconoció en temas de geopolítica, calentamiento global, personas trans y una lista interminable. / La Casa Blanca acusa al medio de “deshonestidad deliberada” y de difundir “noticias falsas”
Cuando la BBC (British Broadcasting Corporation, el servicio público de radiodifusión del Reino Unido) asumió opinar sobre la información, no sólo evadió una responsabilidad profesional con su público y su propósito. Su valor social se fue al suelo, su credibilidad es poca; BBC es “una máquina de propaganda izquierdista”, aseguran desde el equipo del presidente Trump.
BBC cada vez que está en aprietos reitera su manera de actuar: investigaciones y disculpas con una preocupación fingida; esta vez se incluyó renuncias; su director general, Tim Davie, y su directora ejecutiva, Deborah Turness, están afuera.
Michael Prescott, periodista, compiló en detalle y publicó en The Telegraph, graves violaciones de la neutralidad. Incluyó la edición de un discurso de Donald Trump para un episodio de Panorama, que tergiversó el significado de las palabras del presidente estadounidense.
En el video manipulado de BBC se ve a Trump diciendo: «Vamos a ir caminando al Capitolio y estaré allí con ustedes y lucharemos. Lucharemos como demonios. Si no luchan con todas sus fuerzas, ya no tendrán país».
El discurso original de Trump dijo: «Vamos a marchar, y estaré allí con ustedes. Vamos a marchar, vamos a marchar por donde quieran, pero creo que aquí mismo, vamos a marchar hacia el Capitolio y vamos a aplaudir a nuestros valientes senadores y congresistas, y, probablemente, no aplaudiremos tanto a algunos de ellos, porque nunca recuperaremos nuestro país con debilidad; hay que demostrar fortaleza y hay que ser fuertes… Sé que todos ustedes pronto marcharán hacia el Capitolio para hacer oír sus voces pacíficamente y con patriotismo».
BBC ha estado repleta de activistas de izquierda y un puñado de derechistas. Tras cincuenta años, ningún cambio en la dirección logrará que la BBC sea remotamente imparcial.
BBC no es que intente deliberadamente presentar una perspectiva distorsionada de la actualidad o de cualquier otro tema. Es peor que eso; la distorsión está tan arraigada en la cultura mediática que, colectivamente, es incapaz de comprender que existen otras perspectivas.
El hecho de que la BBC se autofinancie en competencia con Sky, GB News y otras compañías no evitará que tome «posturas» (esos tiempos ya pasaron) ni que su personal siga siendo el completo idiota que suele ser (¡eso nunca sucederá!), pero al menos significará que, para sobrevivir, tendrá que intentar reflejar las opiniones sensatas de los espectadores «normales».




