En Colombia cada año se pierden más de 9,7 millones de toneladas de alimentos que podrían aprovecharse como sustento para los 15,5 millones de colombianos que comen menos de tres comidas al día.
La Representante a la Cámara del partido de la U, Saray Robayo Bechara autora de la iniciativa aseguró que, lo que se busca incentivar las donaciones a los bancos de alimentos en buen estado, a través del beneficio tributario donde se propone el aumento del descuento máximo a aprovechar en el impuesto de la renta a aquellos donantes, pasando de un 25% al 40%, y en situaciones de emergencia poder llegar hasta el 50%.
“La pobreza que padece una buena parte de la población colombiana no se combate con discursos, lo que se requiere es comida. Es necesario que no se desperdicie mientras la gente está aguantando hambre”, puntualizo Robayo.
Los bancos de alimentos como receptores
La congresista explicó que los bancos de alimentos, encargados de recolectar los productos que no han sido vendidos o que están próximos a caducar y aún son aptos para el consumo humano, son una excelente alternativa para que las familias puedan acceder a sus tres comidas, y es un trabajo que debe replicarse en todo el país como una fórmula frente al tema de la pobreza extrema y multidimensional. Además, insistió en que los impuestos no pueden ser barreras y menos cuando se habla de comida.
«Esperamos con este proyecto de ley que los bancos de alimentos tengan más herramientas y claro, más comida para distribuir a las familias de bajos ingresos, personas en situación de calle y comunidades vulnerables», concluyo la congresista.
Con información y foto de la Cámara