En primera vuelta fue aprobado el Proyecto de Acto Legislativo 254 de Cámara y 019 Senado de 2022, por medio del cual se reconoce al campesinado como sujeto político de derechos y de especial protección constitucional y se integra el bloque de constitucionalidad, el texto de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los campesinos y de otras personas que trabajan en las zonas rurales.
Con 137 votos por el Sí y 2 votos por el No, fue aprobado en la Plenaria de la Cámara este proyecto de Acto legislativo, que reconoce al campesinado como sujeto de especial protección, entre otros aspectos.
El propósito de esta iniciativa constitucional, es reconocer formalmente en la Constitución Política, al campesino como un sujeto especial de derechos en el marco de un actor, digno, cultural, social, económico, ambiental y productivo etc., es decir sujeto de especial protección por el Estado colombiano. Hasta ahora el campesinado no había sido reconocido formalmente. Por eso la idea es modificar el artículo 64 de la Carta Magna con el fin de lograr esos reconocimientos tanto en la tenencia de la tierra como su reconocimiento total dentro de la sociedad.
La realidad del sector campesino
De acuerdo con el Dane, se estima que hoy, el 86 por ciento de los hogares campesinos del país trabajan en la informalidad y el 29,3% se encuentran en situación de pobreza multidimensional, asimismo el 30.6% habita en vivienda como usufructuarios (que son personas que no gozan de la propiedad de sus viviendas) y tan solo el 51,2 de los hogares, quienes viven en centros poblados y rurales dispersos cuentan con servicio de acueducto, y solo el 29,8% tiene acceso a la Internet.
Por otro lado, entre 2019 y 2020, la deserción escolar pasó del 4,6% al 30,1% para la población rural, otro de los problemas es que, 501 predios concentran más del 44% del área disponible en el país mientras, más del 48% de predios tienen solo el 0,5% de la tierra, constituyéndose en el sector cultivable en el país, en donde la mujer rural es la más pobre.
Otra realidad, según estadísticas del Dane, es que la mujer destina de 8 a 9 horas al trabajo no remunerado mientras que los hombres solo dedican 3, finalmente las tareas del cuidado familiar recaen sobre ellas. Entre otras estadísticas.
Por eso la iniciativa legislativa busca bajar ese alto grado de desigualdad y asimismo el Congreso tiene una deuda con el campesinado, en donde la Constitución Política, debe garantizar el acceso verdadero a la tierra enfocado sobre unas políticas reales sociales basadas en el censo agropecuario y la lucha de los propios campesinos. La idea es que el Estado garantice el derecho a la participación de este sector rural a través de los mecanismos de participación ciudadana, entre otros aspectos.
Diógenes Quintero, ponente del proyecto y congresista en representación de las víctimas del Catatumbo, afirmó que este Acto Legislativo “es un sueño histórico de los campesinos de Colombia que significa la reivindicación de sus derechos, en donde hoy, hay un ambiente de unidad, esto después de cinco ocasiones de intento de presentar esta iniciativa legislativa, por eso reconozco el liderazgo del actual Gobierno”.
Finalizó Diógenes “La brecha que hay en el sector rural y el conflicto armado por mucho tiempo en el campo mantuvieron en la marginalidad a los campesinos y campesinas de Colombia, y fue solo hasta el 2019, que se pudo establecer que hay una población distinta, el 9,9% tiene gas natural, 12% alcantarillado y el 23% le recogen las basuras”. “Todo en una lucha histórica a través de movilizaciones y exigencia de derechos y más en el caso del nororiente colombiano en donde se han logrado mejoras en el sector salud y educación pero también bajo el sacrificio de muchas vidas”.
Con información y foto de la Cámara.
