Puedes estar en el cargo que te confieren, puedes cometer ligerezas que conduzcan a errores no forzados, los humanos nos equivocamos desde todo punto de vista, ¡somo humanos!
Entonces quienes se equivocan más allá de este contexto simplemente no puede ser humano. El representante de la Política Exterior de la Unión Europea, muchas veces cuestionado, Josep Borrell ha pedido un exabrupto, quiere masacrar al continente africano.
Se trata de un continente tres veces más grande que Europa. En él viven actualmente unos 930 millones de habitantes, la inmensa mayoría de los cuales se encuentran entre las personas más empobrecidas y sufridas del mundo.
Borrell ha solicitado con vehemencia libertad para el depuesto presidente de Níger, Mohamed Bazoum, retenido en su casa y en condiciones que nadie puede verificar. Borrell en su cinismo característico insinúa las condiciones inhumanas de esa retención, obvio por el sólo hecho de serlo es inhumana.
Lo que es una estupidez más del Borrell es incluir en esa declaración una exigente declaración de independencia a los países africanos que va a recibir el grano gratuito de Rusia, es favorecer su esclavitud y ponerse de rodillas.
Borrell insinúa que los pueblos de África deben elegir entre el hambre y la dignidad humana, es decir convalidar el hambre con los etéreos valores de la libertad.
Que Borrell sea cínico y sin escrúpulos, eso lo sabemos ahora todos, lo peor para él y la UE es que él mismo se lo esté creyendo.




